- Un mero de 50 kilos despertó la expectación de todos en la Praza de Abastos de Santiago: «La gente no dejaba de sacarle fotos»
Esta mañana, un impresionante mero de 50 kilos se convirtió en el centro de atención en la Praza de Abastos de Santiago, destacando en el mostrador del puesto Peixes e Mariscos Carlos. Este mediodía será llevado al restaurante del hotel A Quinta da Auga.
El viernes por la mañana, entre los puestos de la Praza de Abastos de Santiago, hubo un claro protagonista: un mero de 50 kilos que sobresalía del mostrador del puesto de Peixes e Mariscos Carlos. Carlos Fernández, el dueño, tuvo dificultades para capturar el enorme pez entero en una foto. «Normalmente, tenemos meros de 4, 5 o 6 kilos como máximo, pero ayer, cuando llegué a la lonja de Ribeira, un barco ya nos había advertido que habían encontrado un banco de ejemplares muy grandes. Cogí un mero de 19 kilos y otro de 50. Desde la misma lonja contacté con varios posibles clientes, como el jefe de cocina del hotel A Quinta da Auga, Federico López, quien no dudó en aceptar», cuenta Carlos, explicando que esta mañana, al mostrar ambos ejemplares en la plaza compostelana, se creó una gran expectación.
«El mero de 50 kilos atrajo muchísima atención. Todo el mundo decía que pocas veces había visto un ejemplar así. Lo tuvimos expuesto y ahora, al mediodía, ya irá para A Quinta da Auga», comenta, prefiriendo no revelar el precio. «Puedo decir que el de 19 kilos se vende a 30 euros el kilo, lo que sería un total de aproximadamente 600 euros», relata.
Federico López, jefe de cocina del Hotel A Quinta da Auga y del restaurante Filigrana, confirma la excepcionalidad del ejemplar. «Cuando Carlos me llamó, no dudé en decir que sí. El año pasado, también procedente del mismo barco, compramos un mero un poco menor, pero que también superaba los 40 kilos. En esa ocasión, nos dio para unas 80 raciones. Este año calculamos que el de 50 kilos dará para unas 100 raciones», anticipa, aclarando que durante dos días dejará reposar al ejemplar. «Así logramos que la carne no esté dura. Lo despiezaré yo, pero hoy aún no», subraya, feliz por la adquisición del impresionante ejemplar.