- Descubre cómo Stolt Sea Farm eleva su beneficio y promueve la sostenibilidad en Galicia a través de su operación acuícola. Impacto económico y social.
La empresa Stolt Sea Farm ha registrado un incremento del 20% en su beneficio operativo, destacando el importante papel de sus siete plantas gallegas en este logro. Estas plantas, ubicadas en diversos puntos de Galicia, no solo contribuyen significativamente a la economía local, sino que también tienen un impacto social, marino y sostenible en la región.
Stolt Sea Farm, perteneciente al grupo Stolt-Nielsen, ha consolidado su presencia en Galicia como un pilar fundamental de su negocio de acuicultura. A través de sus filiales, la empresa opera en una variedad de actividades, desde la logística hasta la acuicultura, siendo esta última un componente esencial de su operación en la región.
Las siete plantas de Stolt Sea Farm en Galicia tienen una capacidad combinada de producción de 6,500 toneladas de rodaballo y 1,700 toneladas de lenguado al año. Estas instalaciones emplean a casi 300 trabajadores y representan un 36.4% del negocio total de la empresa en esta área. Además del impacto económico, estas plantas desempeñan un papel clave en la comunidad local al proporcionar empleo y apoyar la economía regional.
En cuanto a sostenibilidad, Stolt Sea Farm ha demostrado un sólido desempeño en 2023 al mantener precios estables y aumentar los volúmenes de producción tanto para el rodaballo como para el lenguado. La empresa está comprometida con prácticas sostenibles en sus operaciones, lo que incluye la gestión responsable de los recursos marinos y la minimización de su impacto ambiental.
Además, Stolt Sea Farm ha anunciado planes de inversión en Galicia para expandir su capacidad de producción de lenguados en Cervo y construir una nueva planta de procesamiento en Rianxo. Estas inversiones no solo impulsarán el crecimiento económico en la región, sino que también generarán empleo y fomentarán la investigación y el desarrollo en el sector acuícola.
En resumen, Stolt Sea Farm no solo ha experimentado un aumento en su beneficio operativo, sino que también ha demostrado su compromiso con el desarrollo social, marino y sostenible en Galicia. Sus operaciones en la región son un ejemplo de cómo la industria acuícola puede contribuir al crecimiento económico y al bienestar de las comunidades locales, al tiempo que se asegura la protección de los recursos naturales para las generaciones futuras.