- El valiente rescate de una mariscadora atrapada en un acantilado destaca la peligrosa realidad de su trabajo en condiciones extremas.
Una mariscadora fue rescatada este jueves en un acantilado de Foz tras permanecer atrapada alrededor de dos horas con una pierna rota y sin teléfono móvil mientras subía la marea. En torno a las 16.30 horas, el Centro Integrado de Atención ás Emerxencias (CIAE) 112 Galicia recibió la llamada en la que un particular solicitaba asistencia sanitaria, así como un rescate, para una mujer que había caído en una zona rocosa junto al mar en Nois.
El servicio movilizó de inmediato a las Urxencias Sanitarias del 061, además de a los Bomberos de Barreiros, al Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de Cervo, a Protección Civil de Foz y a la Guardia Civil. La operación de auxilio duró más de una hora, puesto que la mujer se encontraba en una zona de difícil acceso, en la parte baja de un acantilado de unos 30 metros de altura, según confirmaron los bomberos barreirenses.
Al parecer, la herida es una mariscadora de Burela que se había desplazado a la zona para coger erizo. Por causas que se desconocen, sufrió una caída y se lesionó de gravedad en una pierna. Estaba sola y no tenía teléfono móvil, por lo que no pudo alertar a nadie. El hecho de que estuviese subiendo la marea complicaba la situación.
En torno a dos horas después, unos particulares avistaron a la herida y alertaron al 112, que puso en marcha el citado operativo de rescate. En el porteo de la mujer, que se realizó en una camilla «nido», colaboraron los bomberos, además de un efectivo del GES cervense y la Guardia Civil. Efectivos del 061 habían llevado a cabo previamente la inmovilización de la extremidad afectada. A continuación, procedieron a su traslado en ambulancia al Hospital Público da Mariña, en Burela.
Este incidente subraya el peligro y el riesgo asociado con el trabajo de recolección de mariscos en zonas rocosas y cercanas al mar.