Redeiras gallegas: un oficio que teje futuro

  • La federación O Peirao refuerza su papel clave en el mar con apoyo a la profesionalización, salud laboral y relevo generacional en este oficio esencial.

Las redeiras gallegas reivindican su espacio en el mar

En un sector donde el trabajo invisible sostiene gran parte de la cadena pesquera, las redeiras gallegas siguen luchando por el reconocimiento y la mejora de sus condiciones. Con unas 150 profesionales agrupadas en ocho asociaciones, la Federación Galega de Redeiras Artesás O Peirao se consolida como una voz esencial dentro del ecosistema marítimo gallego.

La firma de un nuevo convenio de colaboración con la Consellería do Mar no es solo una ayuda institucional: es una apuesta estratégica por un oficio tradicional, artesanal y femenino que sigue siendo fundamental para la actividad pesquera.

Mucho más que remendar redes

El trabajo de las redeiras va mucho más allá de coser o reparar redes. Implica conocimiento técnico, resistencia física y experiencia transmitida entre generaciones, en una profesión donde la especialización es clave para garantizar la eficiencia y seguridad de la flota.

Gracias a su impulso colectivo, este oficio ha logrado su reconocimiento oficial a nivel estatal, con un certificado de profesionalidad que legitima décadas de experiencia. O Peirao ha sido parte activa en este proceso, colaborando con el Instituto Galego de Seguridade e Saúde Laboral (ISSGA) para mejorar las condiciones laborales y prevenir dolencias músculo-esqueléticas comunes en esta actividad.

Salud laboral, diversificación y relevo generacional

Uno de los grandes retos del sector es asegurar la continuidad del oficio. El envejecimiento de la profesión y la escasa visibilidad pública hacen urgente un plan de relevo generacional. Por eso, desde la federación se impulsan iniciativas de formación, visibilización en ferias y congresos, y proyectos de diversificación que permitan ampliar los ingresos durante los meses de menor carga de trabajo.

Algunas de estas propuestas incluyen colaboraciones con diseñadores textiles o museos, experiencias de turismo marinero o la fabricación artesanal de productos reutilizando redes en desuso. Cada hilo cuenta para tejer un futuro viable.

Un tejido vivo y diverso en toda la costa

Las ocho asociaciones que integran O Peirao —ubicadas en A Guarda, Cariño, Cedeira, Cangas, Corme, Malpica, Portosín y Porto do Son— representan la diversidad territorial y cultural del mar gallego. En cada puerto, las redeiras actúan como guardianas de un conocimiento íntimamente ligado a la sostenibilidad, el equilibrio del ecosistema pesquero y el cuidado de las herramientas que hacen posible salir a faenar.

En tiempos donde se habla de digitalización, innovación y sostenibilidad azul, las redeiras nos recuerdan que sin manos que reparen, no hay red que aguante. El mar necesita tecnología, sí, pero también necesita memoria, oficio y cuidado. Y eso, en Galicia, lleva nombre de mujer.