Precariedad de mariscadoras a pie: Mulleres Salgadas alertan sobre la falta de prestaciones por cese

  • Mulleres Salgadas denuncia la grave precariedad de las mariscadoras a pie, desprotegidas ante el parón de actividad y sin prestaciones por cese.

Contexto de la situación

La asociación Mulleres Salgadas, que representa a las trabajadoras del mar en Galicia, ha emitido un comunicado expresando su preocupación por la precariedad que enfrentan las mariscadoras a pie en la región. Según la asociación, muchas de estas trabajadoras están “desprotegidas” debido a la falta de prestaciones económicas durante el parón de la actividad marisquera provocado por la alta mortandad de moluscos en las playas.

Impacto del parón en la actividad marisquera

Desde enero, varias cofradías en las rías gallegas han detenido sus actividades para permitir la recuperación de los bancos marisqueros. Este parón, que se espera se extienda hasta el otoño, ha dejado a mariscadores y mariscadoras sin su fuente habitual de ingresos. Mulleres Salgadas señala que, aunque el Instituto Social de la Marina (ISM) ofrece un sistema de protección para los afiliados al Régimen del Mar, muchas trabajadoras no están recibiendo estas prestaciones.

Casos de desprotección

La asociación destaca varios escenarios donde la desprotección es especialmente grave:

1. Permisos recientes: Profesionales que acaban de obtener su permiso de explotación de marisqueo a pie (permex) y que, por tanto, no han generado derecho a cese.
2. Ingresos reducidos: Mariscadoras y mariscadores que tienen un segundo trabajo con ingresos muy bajos, inferiores a 500 euros al mes, y en algunos casos, incluso menos de 200 euros.
3. Prestaciones agotadas: Personas que han agotado la prestación por cese debido a paros sucesivos causados por la baja productividad de las rías.

Reclamaciones a las Administraciones

Mulleres Salgadas reclama a las administraciones, especialmente a la Xunta de Galicia, que no se olvide a las trabajadoras en situación de precariedad en el sistema de protección actual. Insisten en que el marisqueo debe ser considerado una profesión reglada y no simplemente un complemento a las economías familiares. La asociación también sugiere que la falta de medidas adecuadas para este colectivo podría estar influenciada por la feminización del sector.

Fondos comunitarios y ayudas

Mulleres Salgadas menciona que el marisqueo a pie podría beneficiarse de los fondos comunitarios (FEMPA). Sin embargo, hasta la fecha, las únicas ayudas publicadas están dirigidas a la actividad a flote, dejando desatendidas a las trabajadoras a pie.

Prestaciones y apoyos gubernamentales

Es relevante contrastar esta situación con las políticas de apoyo y prestaciones en otras regiones y sectores. Por ejemplo, en otras áreas de España y Europa, existen programas de ayuda específicos para trabajadores temporales y estacionales que podrían servir de modelo para mejorar las condiciones de las mariscadoras en Galicia.

Análisis comparativo

Un análisis comparativo con otras comunidades autónomas que enfrentan situaciones similares podría proporcionar un contexto más amplio. En algunas regiones, se han implementado programas de capacitación y reconversión profesional para trabajadores del mar, lo cual podría ser una alternativa para las mariscadoras en Galicia.

Informe de la FAO

Un informe reciente de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) sobre la pesca y la acuicultura destaca la importancia de la protección social para los trabajadores del sector. La falta de protección social adecuada puede llevar a una mayor vulnerabilidad y precariedad, especialmente en comunidades dependientes de recursos naturales que pueden ser volátiles.

Conclusión

La situación de las mariscadoras a pie en Galicia requiere atención urgente por parte de las autoridades. Mulleres Salgadas ha puesto de manifiesto una grave problemática que afecta a un colectivo ya vulnerable, enfatizando la necesidad de un sistema de protección social más inclusivo y efectivo. Comparar con otras regiones y considerar modelos exitosos podría ayudar a diseñar soluciones que garanticen la seguridad económica y laboral de las mariscadoras gallegas.