- Acuerdos entre Portos de Galicia y municipios como A Pobra buscan recuperar espacios para el uso vecinal, marcando un paso clave hacia la revalorización urbana y comunitaria.
Espacios para la comunidad: un nuevo horizonte para los terrenos portuarios
La conexión entre los puertos y la ciudadanía en Galicia está cambiando. Portos de Galicia y el Concello de A Pobra do Caramiñal han consensuado hoy la propuesta de reversión al Estado de terrenos considerados innecesarios para la actividad portuaria, un proceso que abre la puerta a la transferencia de estas áreas para su uso vecinal y público.
Este acuerdo incluye espacios emblemáticos como los jardines Valle Inclán, la Praza Maior y el Parque do Castelo, además de un pequeño aparcamiento solicitado por el Concello. Estas áreas, actualmente bajo dominio público portuario, serán puestas a disposición del municipio tras un procedimiento técnico y administrativo riguroso.
Reversión: un proceso técnico y consensuado
El presidente de Portos de Galicia, José Antonio Álvarez, y el alcalde de A Pobra lideraron el encuentro que confirmó esta iniciativa, basada en criterios técnicos avalados por la FEGAMP (Federación Galega de Municipios e Provincias). Este consenso refleja un modelo colaborativo que busca equilibrar los intereses portuarios con las necesidades de las comunidades locales.
La conselleira de Facenda será la encargada de presentar esta primera fase del plan al Consello da Xunta, que trasladará la propuesta al Ministerio para su aprobación final en el Consejo de Ministros.
Más municipios, un objetivo común
Además de A Pobra, otros municipios gallegos como Cangas, A Guarda, Vilanova de Arousa y Santa Cruz (Oleiros) están inmersos en este proceso de reversión. Estas acciones reflejan un cambio estratégico: terrenos que ya no cumplen funciones portuarias esenciales pueden transformarse en espacios para la ciudadanía, revitalizando el tejido urbano y fomentando un uso sostenible del territorio.
Un futuro sostenible para los puertos y las ciudades
Este proyecto va más allá de la transferencia de terrenos. Representa un compromiso por integrar mejor los espacios portuarios y las áreas urbanas, creando sinergias que beneficien tanto a las comunidades locales como a la infraestructura portuaria.
La propuesta no solo mejora la accesibilidad y la calidad de vida de los vecinos, sino que también pone en valor el patrimonio cultural y paisajístico de estas zonas, asegurando que los puertos gallegos sigan siendo un motor económico y social para la región.