- El comportamiento inusual de las orcas ‘gladis’ plantea desafíos urgentes para la navegación y la conservación marina.
Un petrolero rescató a los tripulantes de la embarcación siniestrada después de que los cetáceos golpearan el casco y provocaran una vía de agua.
Las orcas ibéricas, conocidas como ‘gladis’, han hundido un nuevo velero en el estrecho de Gibraltar. A las 9:00 de este domingo, los dos tripulantes del velero Alborán Cognac pidieron ayuda tras un encuentro con estos cetáceos a 14 millas del cabo Espartel, en aguas marroquíes. Informaron de daños en el timón y una vía de agua, que ponía en peligro la embarcación de 15 metros de eslora. Salvamento Marítimo movilizó un helicóptero y solicitó al petrolero MT Lascaux, que navegaba cerca, que prestara asistencia. Los tripulantes fueron rescatados y trasladados a Gibraltar, pero el velero finalmente se hundió.
Un comportamiento inusual pero cada vez más frecuente
Este incidente es el primero de este tipo en 2024, sumando siete naufragios desde mayo de 2020, cuando se documentó el primer caso. Según el Grupo de Trabajo Orca Atlántica (GTOA), las ‘gladis’ son una población de 15 ejemplares de orcas ibéricas que viven entre el norte de la península Ibérica y el estrecho de Gibraltar. Desde que comenzó este comportamiento inusual, se han registrado al menos 673 interacciones, cuando las orcas se acercan y, en algunos casos, dañan las embarcaciones.
Los expertos creen que no se trata de ataques intencionados, sino de un comportamiento aprendido, posiblemente relacionado con su curiosidad, juego o alguna precaución instintiva. Alfredo López, biólogo marino y portavoz de GTOA, explica: “No van como un ariete a atacar al barco y a hundirlo, y lo podrían hacer si esa fuera su intención”. Según López, este comportamiento podría haber comenzado con una orca que tuvo una mala experiencia con una embarcación y lo transmitió al resto del grupo.
Análisis de las interacciones
Las orcas suelen acercarse sigilosamente a los barcos y golpear el timón con la cabeza, lo que puede causar daños severos y, en algunos casos, vías de agua que los veleros no pueden manejar. La mayoría de las interacciones se producen con veleros, pero también se han registrado con lanchas a motor, semirrígidas y pesqueros. Un informe del GTOA indica que los veleros monocascos (72%) y catamaranes (14%) son los más afectados, con un tamaño medio de 12 metros.
El Ministerio de Transportes ofrece recomendaciones para navegantes en estas zonas. Aconsejan evitar la navegación por áreas donde se han producido estos incidentes y, si es inevitable, mantenerse cerca de la costa. Durante un encuentro, se debe mantener la embarcación en movimiento y dirigirse a aguas menos profundas, evitando movimientos bruscos que puedan provocar lesiones a bordo. También es crucial no usar medidas disuasorias que puedan dañar a las orcas y notificar cualquier interacción a los Centros de Coordinación de Salvamento.
Casos en las costas gallegas
Además de los incidentes en el estrecho de Gibraltar, las costas gallegas también han experimentado encuentros problemáticos con orcas. En 2021 y 2022, se reportaron varios casos de daños a embarcaciones cerca de la costa gallega, afectando especialmente a barcos de pesca y recreo. Estos incidentes han llevado a las autoridades locales a emitir directrices y alertas para navegantes en la región.
Los patrones de comportamiento en Galicia son similares a los observados en el estrecho de Gibraltar, lo que sugiere que estas orcas podrían estar desarrollando comportamientos comunes en diferentes partes de su rango migratorio. Investigadores están estudiando estos eventos para comprender mejor las razones detrás de este comportamiento y cómo mitigar los riesgos para navegantes y cetáceos.
Impacto y respuesta
El impacto económico y social de estos incidentes es significativo. Los navegantes se enfrentan a daños materiales y, en algunos casos, la pérdida total de sus embarcaciones. Además, existe un riesgo para la seguridad de las tripulaciones. En respuesta, se están desarrollando nuevas estrategias de manejo y protocolos de seguridad para minimizar los riesgos.
Investigación y conservación
La investigación continua es crucial para comprender este comportamiento y encontrar soluciones que protejan tanto a las orcas como a las embarcaciones. El GTOA y otras organizaciones están recopilando datos y llevando a cabo estudios para entender mejor las interacciones y desarrollar medidas de mitigación efectivas. Estas medidas incluyen tecnologías de disuasión no invasivas y la creación de áreas protegidas donde las orcas puedan moverse sin la amenaza de embarcaciones.
Las interacciones entre orcas y embarcaciones en las costas gallegas subrayan la necesidad de estrategias de gestión y conservación que protejan tanto a las especies marinas como a las comunidades que dependen del mar para su sustento. Es fundamental que las autoridades y los investigadores trabajen juntos para encontrar un equilibrio que garantice la seguridad de los navegantes y la conservación de las orcas.
Conclusión
La situación en el estrecho de Gibraltar y en las costas gallegas refleja un fenómeno complejo que requiere atención urgente. Mientras las orcas ‘gladis’ continúan con sus interacciones inusuales con embarcaciones, es esencial desarrollar y aplicar estrategias que protejan a todas las partes involucradas. Con la cooperación de expertos, autoridades y comunidades locales, es posible encontrar soluciones que aseguren la convivencia segura y sostenible entre humanos y orcas en estas áreas críticas.