La unión hace la tapa: O Carballiño corta 590 kilos de pulpo y bate su propio récord

  • Cerca de treinta pulpeiras del municipio ourensano participaron en la hazaña de preparar la tapa más grande del mundo

La expectativa era alta y las pulpeiras de O Carballiño no defraudaron. Este martes, lograron batir su propio récord al preparar una tapa gigante de pulpo, el producto emblemático del municipio, en poco más de once minutos. Aunque el tiempo no era crucial, lo que realmente importaba era la cantidad de pulpo que podían trocear hasta llenar un enorme plato de madera de más de cinco metros de diámetro.

El objetivo era trocear 590 kilos de cefalópodo, diez más que el año anterior, y lo lograron con creces. Cerca de treinta pulpeiras se unieron una vez más para llevar alegría y orgullo a su tierra, trabajando con risas y complicidad. “Pasa un deses para este lado que aquí xa acabamos”, se escuchaba entre ellas. Tenían un objetivo común y lo hicieron realidad, demostrando que la unión es la clave del éxito. “Porque aunque no lo hubiéramos conseguido, sentiríamos que ganamos igualmente, al menos en visibilidad y reconocimiento para nuestro pueblo”, afirmó Laura Fernández, una de las pulpeiras. “Es nuestra semana y estamos muy felices. Hemos practicado todo el verano para dar lo mejor de nosotras aquí y finalmente lo logramos”, añadió su compañera Leticia Nogueira.

“No tenía ninguna duda de que lo conseguiríamos porque somos los mejores. O Carballiño es pulpo y el pulpo es O Carballiño, somos una misma cosa”, decía Pilar Fuchela, matriarca de una familia de pulpeiros. “Todos mis hijos y mis nietos llevan esto en la sangre y saben preparar y cortar el pulpo desde niños, sin importar a qué se dediquen profesionalmente”, añadió.

Decenas de personas se reunieron en la plaza Mayor del pueblo para presenciar la hazaña en directo. En el proceso se emplearon también cincuenta litros de aceite, siete kilos de sal y tres de pimentón. Porque sí, la tapa más grande de pulpo del mundo se hace en O Carballiño y se prepara á feira, como es típico en Galicia y especialmente en este municipio ourensano. La degustación, que incluía una ración individual en un platillo especial por las fiestas, vino de O Ribeiro, pan y bica, tenía un costo de 7 euros. Las pulpeiras se encargaron de servir y repartir las raciones, porque, como dicen, no descansan. “Al menos durante las fiestas, mientras todos se divierten, nosotras es cuando más trabajamos”, comentó Pilar Fuchela. De ahí también su alegría y emoción durante una cita como la de este martes, que ensalza el trabajo, el talento y la calidad del producto de las pulpeiras de O Carballiño. ¡Buen provecho!