- La Eurocámara aprueba un pacto que permite a la flota europea, incluida la española, pescar pulpo y cefalópodos en aguas de Guinea-Bisáu hasta 2029.
En una decisión trascendental para el sector pesquero europeo, el Parlamento Europeo ha dado luz verde al nuevo protocolo de pesca entre la Unión Europea y Guinea-Bisáu, consolidando así uno de los acuerdos más significativos en materia pesquera con un país tercero. Este pacto, que se aplica provisionalmente desde el 18 de septiembre de 2024, se extenderá hasta 2029 y representa una inversión comunitaria de 85 millones de euros, es decir, 17 millones anuales. De esta suma, 4,5 millones de euros por año se destinarán a fomentar la gestión sostenible de la pesca y a respaldar a las comunidades pesqueras locales en Guinea-Bisáu.
El acuerdo abre las puertas de las ricas aguas de Guinea-Bisáu a las flotas de España, Francia, Italia, Grecia y Portugal. En concreto, se autoriza la actividad de 28 atuneros cerqueros congeladores y palangreros de superficie, así como 13 atuneros cañeros. Además, se establece una cuota anual de captura de 3.500 toneladas de cefalópodos y 3.700 toneladas de gambas. Es relevante destacar que este es el único acuerdo vigente que permite la pesca de pulpo y otros cefalópodos, especies altamente valoradas en el mercado europeo.

Sin embargo, el Parlamento Europeo ha manifestado inquietudes respecto a la transparencia en el sector pesquero de Guinea-Bisáu. Se han señalado problemas relacionados con el uso de banderas de conveniencia, cambios de pabellón y estructuras corporativas complejas que podrían facilitar prácticas de pesca ilegal, no declarada y no reglamentada. Por ello, se insta a la Comisión Europea a reforzar la supervisión y garantizar que la cooperación sectorial se adapte mejor a las necesidades locales, beneficiando directamente a las comunidades costeras.
Este protocolo no solo refuerza las relaciones bilaterales entre la UE y Guinea-Bisáu, sino que también establece un marco para la explotación sostenible de los recursos marinos, asegurando beneficios mutuos y promoviendo la conservación de las especies. La flota comunitaria ya faena en estas aguas desde octubre pasado, gracias a la aplicación provisional del acuer