- La campaña de limpieza de pélets en las costas gallegas revela la magnitud del problema de la contaminación marina, con cada tonelada retirada evidenciando la necesidad de una acción urgente y sostenida.
La reciente campaña de limpieza de pélets en las costas gallegas, desplegada como respuesta al vertido del buque Toconao el pasado diciembre, ha puesto de relieve la magnitud del problema de la contaminación marina en la región. La búsqueda de estas pequeñas bolas plásticas, similares a agujas en un pajar, reveló un fenómeno aún más preocupante: la presencia masiva de otros residuos plásticos en las playas, devueltos por la marea.
Por cada tonelada de pélets recuperada, se limpiaron tres toneladas adicionales de otros plásticos, equivalente a residuos urbanos. Este dato alarmante subraya la urgencia de abordar la contaminación marina y sus efectos potenciales en los sectores pesquero y marisquero. La vicepresidenta segunda de la Xunta y conselleira de Medio Ambiente en funciones, Ángeles Vázquez, junto al responsable de Mar en funciones, Alfonso Villares, destacaron la magnitud de la campaña de limpieza, que abarcó el 65% de las playas gallegas y logró recuperar el 20% del vertido total del Toconao.
El esfuerzo coordinado entre la Administración autonómica, los ayuntamientos y los voluntarios resultó en la retirada de 5.034 kilos de pélets de los 26.250 esparcidos por el buque, así como 3.650 kilos de otros gránulos de plástico. A pesar del despliegue de hasta 450 operarios y un gasto total de 2,37 millones de euros, la campaña fue desactivada el pasado 1 de marzo debido a la escasez de pélets en las playas.
La finalización de la limpieza no significa el fin del problema, ya que la presencia continua de plásticos en las playas gallegas requiere una acción sostenida. Tanto Vázquez como Villares hicieron hincapié en la necesidad de seguir trabajando para abordar esta crisis, mientras se destaca la calidad y excelencia de los productos pesqueros gallegos en medio de este desafío ambiental.