- Un trabajador de 26 años falleció tras sufrir graves quemaduras en una explosión en el astillero Blascar, Ferrol. La investigación sigue para esclarecer las causas del incidente.
Un trágico accidente en el astillero Blascar, ubicado en el barrio de A Graña, en Ferrol, ha cobrado la vida de uno de los dos operarios que resultaron gravemente heridos por quemaduras. El joven, de 26 años, vecino de Miño y natural de Portugal, falleció este viernes debido a la gravedad de sus heridas. Sus restos serán trasladados a su ciudad natal en Portugal, donde se espera que sea enterrado este fin de semana.
El accidente ocurrió el jueves por la tarde, cuando el CAE 112 recibió una llamada alertando de que un operario había sufrido quemaduras severas a causa de una deflagración provocada por líquido inflamable. El fuego, según se informó, hizo que su ropa de trabajo prendiera en llamas. Inmediatamente, se movilizaron efectivos de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao, la Policía Nacional y los servicios de Urxencias Sanitarias de Galicia.
Durante el operativo de emergencia, los bomberos de Ferrol accedieron a la bodega del barco, donde se produjo el accidente, y realizaron mediciones de gases para asegurar la zona. En el lugar, se descubrió que otro trabajador también había sufrido quemaduras y requería atención médica urgente. Ambos heridos fueron trasladados a la Unidade de Queimados del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña.
La Policía Nacional ha abierto una investigación para determinar las causas del accidente. Según las primeras informaciones, el accidente pudo haber sido causado por una acumulación de gases en la bodega del barco, posiblemente mientras los trabajadores inyectaban poliuretano en el área. Sin embargo, aún se desconocen los detalles exactos de cómo se produjo la explosión que provocó las graves lesiones.
El fallecimiento del joven ha generado conmoción entre sus compañeros de trabajo y en su comunidad en Miño. El incidente pone de relieve los riesgos asociados al trabajo en astilleros, donde la manipulación de materiales inflamables puede tener consecuencias fatales si no se toman las debidas precauciones.
Las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos, mientras la comunidad local se prepara para despedir al joven trabajador este fin de semana en su ciudad natal en Portugal.