Explosión y misterio: el carguero ruso Ursa Major naufraga

  • El hundimiento del Ursa Major en el Mediterráneo deja dos desaparecidos y desata interrogantes sobre una posible misión secreta con destino Siria.

Un naufragio envuelto en incertidumbre

La madrugada del pasado lunes, el carguero ruso Ursa Major desapareció bajo las aguas del Mediterráneo tras una explosión en su sala de máquinas. El incidente ocurrió a 90 kilómetros de Almería, en aguas internacionales. De los 16 tripulantes a bordo, 14 fueron rescatados con vida, mientras que dos marineros permanecen desaparecidos, desatando una operación internacional de búsqueda y rescate.

Construido en 2009 y gestionado por Oboronlogistika, una empresa estatal rusa, el carguero transportaba grúas portuarias y equipos para rompehielos, según las autoridades rusas. Sin embargo, esta versión ha despertado sospechas tanto en España como en medios internacionales, que apuntan a un posible destino encubierto en Siria.

El misterio del destino real

Aunque la versión oficial indica que el buque se dirigía a Vladivostok, fuentes anónimas y reportes en medios británicos como The Sun sugieren que su verdadero objetivo era Siria. Según esta hipótesis, el Ursa Major podría haber estado retirando equipamiento militar tras las recientes derrotas del régimen de Bashar al Asad, respaldado históricamente por Moscú.

El itinerario del carguero, que partió de San Petersburgo hace 12 días, alimenta las dudas. Tras cruzar el mar del Norte y el Canal de la Mancha, el buque navegó por el Mediterráneo en condiciones meteorológicas adversas. La explosión que provocó su hundimiento ha sido descrita por expertos como «altamente inusual», lo que aumenta las especulaciones sobre un posible sabotaje o fallo técnico en un equipo militar sensible.

Un rescate bajo presión internacional

El operativo de rescate, liderado por Salvamento Marítimo español, desplegó barcos y un helicóptero para auxiliar a los tripulantes. Sin embargo, la llegada de un buque de guerra ruso a la zona poco después del incidente ha añadido una dimensión política al desastre. Moscú ha mantenido un hermetismo absoluto, mientras las autoridades españolas investigan las circunstancias del naufragio.

“Las condiciones climáticas dificultaron las maniobras, pero seguimos trabajando en la localización de los desaparecidos,” declaró un portavoz del Servicio de Rescate Marítimo. Por su parte, diplomáticos rusos están en contacto con España, aunque hasta ahora no han dado explicaciones sobre las sospechas en torno al destino del buque.

Sospechas que alimentan tensiones

Este naufragio no solo es una tragedia marítima, sino también un episodio que podría intensificar las tensiones entre Rusia y Occidente. Con un contexto geopolítico marcado por el conflicto en Ucrania y la vigilancia internacional sobre las actividades rusas en el Mediterráneo, el incidente del Ursa Major plantea preguntas incómodas: ¿Qué causó la explosión? ¿Por qué había equipo militar a bordo? ¿Era Siria el verdadero destino del buque?

Más sombras que respuestas

El naufragio del Ursa Major no solo deja a dos marineros desaparecidos, sino un misterio que parece más profundo que las aguas donde se hundió. Mientras las operaciones de rescate continúan, el silencio oficial y las hipótesis en torno al carguero alimentan una narrativa en la que lo político y lo humano se entrelazan.

Por ahora, lo único claro es que el Mediterráneo ha sumado un nuevo capítulo a su larga historia de secretos, tragedias y confrontaciones.