Evacuación exitosa del palangrero O Brisan tras varar en O Freixo y después de haber rescatado a los 18 tripulantes 

  • El rescate exitoso del barco O Brisán destaca la valentía y resiliencia de los pescadores gallegos, quienes continúan enfrentando los elementos con determinación y coraje en alta mar.

La tarde de este jueves, los 18 tripulantes del palangrero O Brisán de Ribeira, operando en las aguas del Gran Sol, se vieron obligados a evacuar después de que el barco varara mientras se dirigía a O Freixo. La embarcación, en ruta hacia el astillero Lago Abeijón de Outes para reparaciones, encalló en el canal de acceso de A Misela, específicamente en un banco de arena conocido como A Lomba da Misela. Una embarcación auxiliar del astillero rescató a la tripulación, que se encontraba completa a bordo del pesquero en ese momento.

La empresa armadora explicó que la tripulación estaba a bordo del O Brisán ya que se esperaba que después de las reparaciones en el astillero, el barco partiera hacia el Gran Sol. Se presume que el accidente ocurrió debido a las condiciones del canal, que es estrecho y requiere navegación con marea alta.

Salvamento Marítimo Fisterra fue alertado del incidente y desplegó la Salvamar Regulus para asegurar la zona. Afortunadamente, inicialmente no se detectaron daños significativos en el barco como resultado del encallamiento. La empresa armadora y el astillero tomaron medidas para realizar las reparaciones necesarias.

La madrugada fue intensa en el astillero, con un bateeiro y la Salvamar Régulus remolcando el O Brisán hasta el astillero Lago Abeijón. Aprovechando la pleamar, el pesquero pudo desatascarse del banco de arena y dirigirse hacia el astillero para las reparaciones. Los 18 tripulantes ya habían sido evacuados antes del incidente y, una vez que se repare la avería, el O Brisán zarpará hacia el Gran Sol para continuar con sus operaciones de pesca.

El accidente del O Brisán es un recordatorio de los peligros que enfrentan los pescadores en alta mar. A pesar de los avances tecnológicos y los protocolos de seguridad, la naturaleza impredecible del mar puede llevar a situaciones peligrosas como esta. La rápida respuesta de Salvamento Marítimo y el trabajo conjunto de la empresa armadora y el astillero fueron cruciales para garantizar la seguridad de la tripulación y minimizar los daños en el barco.

Para los 18 tripulantes del O Brisán, este incidente fue una experiencia aterradora pero también un recordatorio de la importancia de estar preparados para enfrentar cualquier situación en el mar. Su rápida evacuación y el éxito del rescate son un testimonio de su profesionalismo y dedicación a su trabajo.

A medida que el O Brisán se prepara para regresar al Gran Sol después de las reparaciones, la industria pesquera gallega continúa su labor vital en las aguas del Atlántico. A pesar de los desafíos y los riesgos, los pescadores siguen desempeñando un papel crucial en la economía y la cultura de la región, asegurando un suministro constante de pescado fresco para los mercados locales e internacionales.

En última instancia, el incidente del O Brisán es un recordatorio de la valentía y la resiliencia de los pescadores gallegos, que continúan enfrentando los elementos con determinación y coraje. A pesar de los obstáculos, su compromiso con su oficio y su comunidad sigue siendo inquebrantable, asegurando que la tradición pesquera de Galicia perdure por generaciones venideras.