- La caída en la productividad pesquera amenaza la economía de las rías, mientras el BNG exige soluciones urgentes y un plan de acción con respaldo científico.
La productividad de las rías gallegas, eje económico y cultural de muchas comarcas, se encuentra en una encrucijada. Con una pérdida de 24.000 toneladas de pescado y una caída en facturación de 30 millones de euros durante el último año, el BNG ha lanzado una advertencia clara: no hay tiempo que perder.
A través de una iniciativa parlamentaria, la diputada Rosana Pérez ha exigido al Gobierno gallego que, en el plazo de un mes, convoque a expertos de universidades y centros de investigación para analizar las causas de este declive. Según Pérez, estas cifras son solo la punta del iceberg de un problema que lleva más de una década gestándose, con un sector que ha alertado repetidamente de la falta de acción política.
Un sector en declive
Los números hablan por sí solos: en 2024, la venta de pescado en las lonjas gallegas cayó un 7,5 % respecto al año anterior. Además, se han reducido en un 6,3 % los permisos de marisqueo, reflejando una alarmante pérdida de empleo en una actividad que sustenta a numerosas familias.
“El hundimiento del marisqueo no solo afecta al presente del sector, sino que abre la puerta al producto foráneo, muchas veces introducido por vías irregulares, poniendo en peligro nuestra identidad pesquera”, advirtió Pérez.

Exigen medidas concretas
El BNG no solo reclama un diagnóstico, sino también presupuestos específicos y medidas efectivas para revertir la situación. Entre las propuestas, destaca la creación de una comisión de trabajo con expertos científicos y representantes del sector, con el objetivo de identificar las causas del problema y trazar un plan de recuperación.
Rosana Pérez subraya que la inacción del Gobierno gallego ha permitido que un sector clave para muchas comarcas gallegas quede al borde del colapso: “La pesca y el marisqueo son el oxígeno económico de estas regiones. No podemos permitirnos seguir mirando hacia otro lado”.
Una crisis con impacto global
La situación de las rías gallegas no solo afecta al mercado local, sino que tiene implicaciones más amplias para el comercio pesquero nacional e internacional. La pérdida de competitividad frente a los productos foráneos amenaza con alterar profundamente el equilibrio de la industria pesquera en Galicia, una de las principales potencias del sector en Europa.
Un desafío para el futuro
La propuesta del BNG pone sobre la mesa una cuestión urgente: ¿está el Gobierno gallego preparado para salvar las rías? Más allá de las cifras, lo que está en juego es la supervivencia de un sector que define la identidad de Galicia y sostiene a miles de familias.
Mientras las rías gallegas luchan por recuperar su pulso, el tiempo corre y las decisiones políticas se vuelven más cruciales que nunca.