- La creciente frecuencia de incidentes marítimos en Galicia, como los rescates de dos menores en Vigo y Poio, pone de relieve la falta de conocimiento y responsabilidad con peligrosas consecuencias.
El aumento de la frecuencia de incidentes marítimos en Galicia ha dejado nuevamente en evidencia la falta de conocimiento y responsabilidad por parte de los protagonistas, como lo demuestran dos recientes rescates de menores en Vigo y Poio. Estos sucesos resaltan la necesidad urgente de mayor educación y precaución en actividades náuticas para evitar situaciones peligrosas.
En Vigo, un niño fue hospitalizado después de lanzarse imprudentemente al mar desde el muelle de la playa del Matadero, cayendo sobre un velero que pasaba en ese momento. El menor, que saltó desde una altura de aproximadamente tres metros sin percatarse de la proximidad del barco, fue rescatado por socorristas y trasladado a tierra, donde una ambulancia lo llevó al hospital. Este incidente, que ocurrió a plena tarde, refleja la falta de precaución en un área de amarre.
En otro incidente en Poio, un adolescente madrileño tuvo que ser rescatado por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil después de que su pequeña embarcación, un Dinghy, fuera arrastrada por el viento hacia unas bateas en la ría de Pontevedra. El joven se había quedado dormido en la lancha, y al despertar, sus intentos de remar de vuelta a la playa de Laño resultaron inútiles. La Guardia Civil tuvo que intervenir y remolcar la embarcación hasta la orilla. La familia del menor, que se encontraba en un barco cercano, también había salido a buscarlo, preocupada por la situación.
Estos incidentes subrayan la importancia de una mayor conciencia y responsabilidad en las actividades acuáticas, especialmente entre los más jóvenes, para evitar que situaciones imprudentes se conviertan en tragedias.