Antonio Basanta se marcha a Bruselas para asesorar en pesca

  • El director gallego de Pesca deja la Xunta para unirse al gabinete europeo del comisario de Océanos y Pesca, aportando la voz de Galicia en Bruselas.

Antonio Basanta: de Galicia a la Comisión Europea

Antonio Basanta, actual director general de Pesca, Acuicultura e Innovación Tecnológica en la Consellería do Mar, da el salto a Bruselas. El número dos del departamento que dirige Rosa Quintana se incorporará al equipo del comisario europeo de Océanos y Pesca, el chipriota Costas Kadis, como asistente político. Un movimiento que no solo refuerza la presencia de profesionales gallegos en las instituciones comunitarias, sino que además consolida la representación de la pesca gallega en Europa.

Una trayectoria vinculada al mar

Basanta, nacido en Cervo en 1978, es un veterano en la administración pública con una carrera ligada tanto a la gestión política como al mar. Licenciado en Ciencias Políticas y en Administración por la Universidad de Santiago de Compostela y con un máster en Economía Pesquera, su currículum incluye cargos clave en áreas medioambientales y marítimas de la Xunta. Desde 2022 ocupaba la dirección general de Pesca, un puesto desde el que gestionó aspectos estratégicos como las relaciones con Europa, las normativas para la flota gallega y la innovación tecnológica en el sector pesquero y acuícola.

Su salida, aunque fortalece la voz de Galicia en Bruselas, supone un golpe organizativo para la Consellería, que pierde a uno de sus hombres de confianza en plena transición de normativas clave para la flota y la acuicultura.

Bruselas, una puerta a la pesca gallega

La llegada de Basanta al gabinete de Kadis, quien sustituye al maltés Virginijus Sinkevicius, no es un cambio menor. El comisario europeo tendrá a su lado a un conocedor del mar gallego, de sus retos y problemáticas, en un contexto en el que la pesca europea enfrenta desafíos cruciales: la sostenibilidad de los recursos, la transición hacia energías verdes en las flotas y la defensa de los intereses del sector ante los acuerdos internacionales.

Galicia, como primera potencia pesquera de Europa, necesita una voz fuerte en Bruselas, y la experiencia de Basanta podría resultar determinante en las negociaciones y en la aplicación de nuevas normativas. La Comisión Europea no es terreno desconocido para él, dado su trabajo previo en foros pesqueros comunitarios y su participación en políticas ambientales.

Un cambio con doble impacto

Mientras la pesca gallega celebra el refuerzo en la esfera europea, la Consellería do Mar afronta ahora la tarea de encontrar un sustituto capaz de mantener el rumbo de las políticas pesqueras e innovadoras. La salida de Basanta llega en un momento delicado para el sector, marcado por incertidumbres sobre las cuotas, la renovación de la flota y las exigencias medioambientales.

Sin embargo, esta incorporación también abre una puerta a que las demandas del sector gallego, muchas veces relegadas, tengan una atención más directa en Bruselas. Los próximos meses serán clave para evaluar si la pesca gallega, ahora con un aliado dentro de la Comisión Europea, logra posicionarse con mayor fuerza en las decisiones comunitarias.

En un escenario en el que el mar es fuente de vida, trabajo y riqueza, el salto de Basanta podría suponer un pequeño pero importante giro para la Galicia marinera.