- El aumento de los decomisos de marisco y pescado ha sido del 160% en comparación con el primer semestre de 2023.
Las mareas vivas que se están registrando esta semana en la ría de Ferrol, caracterizadas por siete bajamares consecutivas de menos de medio metro desde esta noche hasta el mediodía del sábado, han generado preocupación en el sector marisquero local. Se anticipa una mayor actividad furtiva en las áreas más productivas, lo que ha llevado a las cofradías a redoblar las medidas de vigilancia para proteger sus recursos.
Desde la cofradía de Curuxeiras, se han coordinado esfuerzos con el Servizo de Gardacostas y el Concello para intensificar la supervisión y evitar la extracción ilegal de marisco. “Nos encontramos en una situación crítica en cuanto a producción y no podemos permitir que personas sin licencia exploten las pocas zonas que aún están en buenas condiciones”, afirmó el patrón de la cofradía de Ferrol, Gustavo Chacartegui. Agradeció además el apoyo constante del Gardacostas, el Concello y la Guardia Civil en estas tareas.
Jorge López, portavoz de la cofradía de Barallobre, subrayó la relevancia de mantener un control riguroso en estos días debido a la magnitud de las mareas, que favorecen el marisqueo a pie al exponer zonas que suelen ser inaccesibles durante el resto del año. Esta situación contrasta con el marisqueo a flote, ya que las corrientes fuertes dificultan la labor en algunas áreas.
Para el patrón mayor de Barallobre, la lucha contra el furtivismo en la ría de Ferrol requiere un enfoque integral. “No basta con que los responsables de la vigilancia hagan su trabajo. Es necesario actuar desde arriba, ya que en ocasiones, quienes afirman estar en contra del furtivismo también participan en él”, apuntó.
Aumento de decomisos
El Servizo de Gardacostas, dependiente de la Consellería do Mar, ha registrado un incremento en la eficacia de sus operativos contra el furtivismo en comparación con el año anterior. Durante el primer semestre, se decomisaron 614 kilos de diversas especies de marisco y pescado, principalmente marisco, destacando la vieira, que representó más de la mitad de las incautaciones. En total, los agentes recuperaron 390 kilos de este molusco, que fue devuelto al mar por haber sido capturado fuera de los canales legales. En el mismo periodo del año pasado, las incautaciones sumaron poco menos de 240 kilos, con el erizo dominando el 90% de ese total.
Este aumento en los decomisos en la ría de Ferrol contrasta con las cifras generales de Galicia, donde el volumen de productos decomisados ha disminuido en la primera mitad del año. En 2023, se confiscaron más de 12 toneladas (12.200 kilos) de productos que iban a ser comercializados de forma irregular, mientras que en lo que va de este año la cifra ha caído a 10,6 toneladas. Sin embargo, el mes de julio ha permitido equilibrar las cifras, alcanzando las 14,6 toneladas en ambos ejercicios.
Aumento en las incautaciones de equipos
La situación en la ría de Ferrol refleja también un incremento en la incautación de herramientas utilizadas por los furtivos, con cerca de 150 equipos confiscados en comparación con los 50 del primer semestre de 2023. Los trasmallos, nasas para choco y miños han sido los artefactos más comunes. En el resto de Galicia, las incautaciones de herramientas han disminuido, pasando de 9.800 en 2023 a poco más de 7.500 este año. No obstante, el mes de julio ha permitido nivelar las cifras, con 14.000 equipos incautados frente a los 13.300 del año pasado.
Convocatoria para ayudas a proyectos de regeneración
Hasta el 13 de septiembre, las cofradías de pescadores pueden solicitar ayudas para proyectos de regeneración de bancos marisqueros afectados por la disminución de la productividad en los últimos 12 meses. Esta convocatoria forma parte de un conjunto de medidas impulsadas por la Consellería do Mar, que ha asignado un presupuesto de más de 120 millones de euros para los próximos años. En esta ocasión, la partida destinada a estos proyectos es de 300.000 euros, con un límite de 15.000 euros por proyecto.
Estas ayudas están dirigidas a la adquisición de semilla para repoblar zonas que han perdido su capacidad productiva, un problema agravado por las lluvias del otoño e invierno pasado y que en la ría de Ferrol se arrastra desde hace varios años. Es importante destacar que la siembra de semilla solo podrá realizarse en áreas donde previamente se haya acondicionado el sustrato. El plazo máximo para la resolución de estas solicitudes es de cinco meses.